25.11.11

Desde: Concariño@hotmail.com
Para: Tequiero@hotmail.com
Fecha: 25.noviembre.2011

Querid@ lector@:

Te escribo porque hoy es un día muy especial para alguien que conozco desde hace ya muchos años y quiero compartir este momento con alguien.
Es el cumpleaños, sí el 17 cumpleaños, de una persona demasiado importante en mi vida. Te preguntarás ¿tan importante es para mí un cumpleaños?... Pues te digo que sí, ya que para mí, ahora mismo, un cumpleaños, no significa regalos, ni felicitaciones o besos de agradecimiento (aunque no deja de ser esencial), para mí un cumpleaños, no un cumpleaños cualquiera eh, sino el cumpleaños de alguien singular. Es importante porque es señal de un año más que hemos estado unidas, viviendo juntas aventuras inolvidables, compartiendo risas, secretos, lagrimas, gustos, sueños, costumbres, bromas, chistes, tonterías, peleas, discusiones, horas de estudio, horas hablando por teléfono, conversaciones interminables por MSN, privados por Tuenti, fotos que nos gustan o que no nos gustaban, tardes hablando inglés, horas viendo películas de miedo, escuchando música, haciendo obras de teatro caseras, riéndonos de personas que se lo merecían, comiendo pipas o palomitas hasta atragantarnos, emborrachado y llorado de risa, yendo a conciertos, cogido olas, ido fiestas privadas que solo ella y yo sabemos los invitados, hecho cosas increíbles y planeado distintos momentos puntuales del futuro, también acompañado cuando más lo hemos necesitado y gritado cuando era la hora de gritar... Además con nuestras diferencias, porque somos las más incompatibles, las más dispares, opuestas, antagónicas que puede haber, aunque a la vez somos demasiado iguales, nos queremos. A pesar de todo eso que nos hace estar semanas sin dirigirnos más de dos palabras, nos queremos. ¿Y sabes qué? Estoy muy contenta por ello, porque sé que aunque sigan pasando los años y las mismas cosas sigan repitiéndose y las mismas broncas sigan ocurriendo, voy a seguir cada año alegrándome por su cumpleaños, dándole mi felicitación de la manera más original que se me ocurra y queriéndola cada día más. Y no solo en su cumpleaños, sino todos los días, porque aunque no se lo repita diariamente, ella es y será (de eso estoy segura) una persona demasiado importante en mi vida.
Es hora de terminar que ya llegó la hora de disfrutar y celebrarlo por todo lo alto, como se merece.
Solo me queda desearle muchísimas felicidades y decirle que la quiero con locura, hace seis años, dos, ayer, hoy, mañana y siempre.
Con muchísimo cariño,

Sara



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