26.5.10

Frustrante impotencia.

Naces con el premio de la autosuficiencia colocada entre el primer y el segundo pensamiento de tu conciencia . Creces con el de valor de tus manos, arrancando obstaculos y matando lagrimas que te impiden alcanzar tus metas. Te desgastas contra la nada. Luchas por tu lugar en este mundo.
Respiras aun cuando te ahogas en cada aliento. Sales al mundo creyendo que podrás con todo.

Y te despiertas una mañana, la impotencia se ha pasado con tu sentido natural. Lo intentas, pero la vida es a veces un misterio sin claves ni pistas para descifrar. Tu cuerpo no responde, tu mente se bloque, tus manos solo tiemblan.

Querer y no poder. Necesitar y no poder. Sentir y no poder. Pensar y pensar y pensar... y no poder.

Cuando el cuerpo no acompaña a nuestros pasos, de nada sirve obsecionarnos con lugar contra viento y marea, de nada sirve pelear contra la evidencia, llorar contra la insuficiencia. Cuando el cuerpo no acompaña, solo podemos dejar paso a la paciencia, coger aire, mantener la calma, y no dejar que la frustración, la rabia o cualquier otro sentimiento.. levante muros indestructibles entre nuestro presente y nuestro futuro. Porque aunque borroso lo veamos, esta a la vuelta de la esquina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario